Hace un año atrás, River comenzaba la puesta a punto tras el parate por la pandemia. Y hoy, nadie podría imaginar que la zaga central del Millonario iba a ser lo que mejor se afianzó en 2021. Es que por aquel entonces, todavía estaba Lucas Martínez Quarta, además Javier Pinola era indiscutido para Marcelo Gallardo y Robert Rojas estaba por arriba de Paulo Díaz.
Y ni hablar de David Martínez, porque el pibe fue a sumar experiencia en Defensa y Justicia, por lo que seguía en el Halcón. Pero el fútbol se define como la dinámica de lo impensado y las realidades de dicho deporte pueden cambiar de un día para el otro. Porque los rendimientos son los que producen estas variantes y así fue el caso de la nueva dupla en defensa.
A comienzos del corriente año, el Muñeco le pidió a la dirigencia que retornara a Núñez una de las joyas del fútbol argentino: David Martínez. Y junto a él, se produjo además el regreso de un ídolo del club como Jonatan Maidana. Lucas Martínez Quarta ya transitaba sus primeros pasos en la Fiorentina y la disputa por un puesto como titular había iniciado.
En varias ocasiones, el entrenador de River utilizó la línea de tres centrales y por ende las chances de jugar eran mayores para aquellos zagueros. Pero con el correr de los cotejos, Gallardo decidió ir con la clásica línea de cuatro y de a poco se fueron ganando un lugar en el equipo fijo Paulo Díaz y David Martínez. Tanto así, que desplazaron a dos experimentados como Maidana y Pinola.
El nivel sostenido en el tiempo
Aunque en este segundo semestre, el Millonario atravesó grandes momentos de irregularidad, la dupla de centrales se permaneció más regular que nunca. Díaz y Martínez mantienen un gran presente y tienen cualidades muy similares. Son tiempistas, veloces, inteligentes, conductores, se animan al avance y tienen buen pase entre líneas junto al gran juego aéreo.
Pero lo más relevante de todo es que lo pueden sostener en el tiempo, son regulares y en más de una oportunidad salvaron al equipo. Como lo hicieron ayer, donde su gran aporte de marca y recuperación se hicieron presentes para contener a los ataques de Vélez. Sin duda, Gallardo logró encontrar una de las armas fundamentales de este River.