La dura derrota de River Plate ante Palmeiras por 3-1 en San Pablo, que significó la eliminación en cuartos de final de la Copa Libertadores, dejó secuelas profundas en lo futbolístico y en lo institucional. El equipo de Marcelo Gallardo volvió a mostrar fragilidad en instancias decisivas, y varios referentes del plantel comenzaron a replantearse su continuidad.
En medio de esta decepción continental, que expuso las fragilidades de una zaga que alguna vez fue impenetrable, emerge la incertidumbre sobre Paulo Díaz, el zaguero chileno de 30 años que parece decidido a buscar una salida del club. Según revelaciones de la prensa argentina en las últimas horas, Díaz ha manifestado su deseo de emigrar ante Gallardo, motivado por una combinación de bajo rendimiento en 2025 –donde alternó titularidades con suplencias y acumuló críticas por errores en duelos clave como el de Palmeiras– y la competencia creciente en la defensa.
🚨 Paulo Diaz BUSCA IRSE de #River
— Banda Roja (@BandaRoja_) September 26, 2025
❌ El defensor cree que ya no es indispensable para Gallardo
➡️ Es uno de los contratos altos del plantel y está muy cómodo en Argentina.
ℹ️ @HernanSCastillo pic.twitter.com/NTwIlbyoav
La caída ante el conjunto brasileño no fue solo un resultado adverso: fue el reflejo de un ciclo que parece haber perdido rumbo. River sumó su tercera derrota consecutiva, quedó afuera de su principal objetivo del año y mostró un desgaste que se traduce en decisiones internas. En ese contexto, Paulo Díaz —uno de los pilares defensivos del equipo— habría comunicado al club su deseo de salir en el próximo mercado de pases.
Díaz, de 30 años, lleva más de cinco temporadas en River y ha sido titular indiscutido en casi todo el ciclo Gallardo y buena parte del de Demichelis. Sin embargo, el desgaste físico y emocional, sumado a diferencias internas con el cuerpo técnico, habrían llevado al defensor a considerar seriamente su salida.
Según trascendidos, hay sondeos desde Brasil, México y Arabia Saudita, y el jugador estaría dispuesto a escuchar propuestas. River, por su parte, no vería con malos ojos una transferencia si llega una oferta acorde a su valor de mercado.
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