Desde que abrió el mercado de pases, la dirigencia de River mira de reojo hacia el Viejo Continente. Mantuvo una posibilidad sobre la mesa hasta último momento, debido a que Marcelo Gallardo necesitaba delantero y, ante su falta de minutos en Fiorentina, todos los reflectores apuntaban a Lucas Beltrán. Claro está que el Millo no se movió solo en esta novela, debido a que varios equipos de Europa y Sudamérica también participaron del tira y afloja.
Después de que Fiorentina le baje el pulgar al préstamo que propuso River, Flamengo se posicionó como el máximo candidato a quedarse con los servicios del Vikingo. Incluso existió una propuesta de 12 millones de euros, que convenció a los altos cargos del conjunto italiano, pero que quedó descartada por la negativa del delantero.
Su idea era continuar un tiempo más en el Viejo Continente, por lo que rechazó cada ofrecimiento y esperó hasta el final por una propuesta convincente. La misma terminó llegando casi en el último suspiro del periodo de transferencias, cuando los dirigentes del Valencia se enteraron de su situación y diagramaron un préstamo que convenció a todas las partes.
“Lucas Beltrán es nuevo refuerzo de Valencia a préstamo sin opción de compra“, confirmó Germán García Grova a horas de que cierre el libro de pases en Europa. De esta manera, el Vikingo encontró un nuevo lugar para cambiar su panorama y terminar de asentarse, después de un paso por la Serie A que que se alejó bastante de lo imaginado en un primer momento.
La postura que mantuvo River
Aunque desde Italia aseguraban que existía un resquicio para que River se quede con los servicios de Lucas Beltrán, la novela debía sufrir un giro total para que Gallardo reciba un sexto refuerzo. Tanto por la postura del jugador como por la decisión de la dirigencia, que bajó la persiana en cuestión de incorporaciones después de los arribos de Juan Portillo y Matías Galarza Fonda.

