Desde hace tiempo, el nombre de Rodrigo Garro suena por lo bajo en los pasillos del Monumental. River no solo realizó intentos por sus servicios durante su paso por Talleres de Córdoba, sino que también consultó condiciones en el último tiempo, luego de que estampe su firma en el contrato con Corinthians. Así, tuvieron lugar unas cuantas novelas en el mercado que, después de numerosos idas y vueltas, dejaron en evidencia un claro desenlace.
Todavía con Martín Demichelis en el banco de suplentes de River, Jorge Brito acercó su primer oferta formal por Rodrigo Garro. La misma rondaba los 9 millones de dólares, y prometía brindarle al Millo un jugador determinante para los metros finales del equipo. No obstante, el Timão bajó el pulgar casi de inmediato, asegurando que la suma que acercó el cuadro de Núñez ni siquiera rozaba la mitad de lo que pretendía.
Tiempo después, ya con Marcelo Gallardo al frente del Millo en su segunda etapa, desde Brasil desvelaron nuevos sondeos por los servicios del mediocampista. Aunque, una vez más, todo terminó quedando en la nada. Principalmente por la decisión del Corinthians, que seguía considerando a Garro como una pieza irremplazable en vistas a futuro.
La decisión del jugador también tuvo peso para que continúe en Brasil, debido a que se mostraba cómodo y no barajaba cambiar de aires en el corto plazo. En definitiva, la posibilidad perdió bastante fuerza con el correr de los meses y fue quedando al margen, mientras que el Timão preparaba un nuevo contrato para su gran figura.
¿Qué dijo Garro del interés de River?
“No me gusta mentirle a la gente. Cuando llegó la oferta de River, dije que estábamos en zona de descenso, que sería una cobardía. No soy de los que se rinden. Sería ir en contra de eso. Cuando llegó el Zenit, fue algo completamente distinto. Sí, cambiaría la vida de mi familia. La vida de todos. Pero sentía que la energía del club nos traía un trofeo, que podíamos ganar un título. No era el momento adecuado”, expresó hace unos meses.

