A lo largo del mercado de pases, la dirigencia de River tuvo mucho trabajo. Permitió unos cuantos cambios en el plantel, tanto para encontrar nuevas alternativas para la Copa Libertadores como para terminar los ciclos que no tenían vuelta atrás. Una realidad que dejó bajo la lupa a una figura que la rompió en el Superclásico, pero que no logró mantener su nivel y terminó trastabillando: “Uno nunca espera”.
Su regreso a Núñez tuvo lugar a mediados de 2023, justo después de la eliminación de River de la Copa Libertadores, a manos de Inter de Porto Alegre. Intentó cambiar su panorama en los meses venideros, aunque recién encontró un giro positivo casi un año más tarde, cuando convirtió el gol del triunfo ante Boca y parecía reencontrarse con su mejor versión.
Se trataba de Manuel Lanzini, quien no a repetir una tarde como aquella de septiembre de 2024 y terminó perdiendo mucho terreno en la consideración de Marcelo Gallardo. Tal fue así que, apenas unos meses después de que renueve su contrato con el Millonario, el entrenador le recomendó que cruce la puerta de salida para que no se quede sin jugar hasta fin de año.
Su despedida de River
“Uno nunca se lo espera, pensaba terminar mi contrato con River. Son decisiones que Marcelo tenía que tomar, a veces te gustan y a veces no“, comentó el mediocampista hace unas horas en conversación con ESPN. Cabe recordar que, sobre la recta final del periodo de transferencias, le puso punto final a su paso por el Millo para sumarse a Vélez.
“No se dio como yo lo imaginaba. A mí me encantaría haber jugado todos los partidos, pero después va en la decisión del técnico. Siempre traté de dar el 100% y me sentí bien. Gracias a Dios no tuve muchos problemas de lesión”, sentenció Manuel Lanzini, quien cerró un ciclo con la camiseta del Millonario que se alejó bastante de lo que imaginaba en un primer momento.
