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La dura crítica que recibió Miguel Borja que sentencia su futuro en River: “No da señales”

El Colibrí atraviesa un momento particular.

Miguel Borja
Foto: @RiverPlate

Hasta el momento, Miguel Borja no ha desplegado su mejor imagen en River. El Colibrí, quien supo brillar y romper récord bajo las órdenes de Martín Demichelis, no ha rendido con Marcelo Gallardo. El delantero colombiano ha dado que hablar en sus últimas presentaciones y un claro ejemplo de esto fue su penal errado ante Ciudad de Bolívar.

El pasado miércoles, el conjunto de Núñez derrotó 2-0 al cuadro de Federal A y avanzó a los 16avos de final de la Copa Argentina. Allí, estuvo presente Borja, quien fue protagonista al malograr un tiro desde los doce pasos. De esta manera, el atacante cafetero estiró su mal momento y las críticas no se hicieron esperar.

De esta manera, el cafetero empeoró sus números en 2025, dado que convirtió apenas dos goles en 11 partidos, ninguna asistencia y falló dos penales. Más allá de esto, recibió el apoyo de sus compañeros, como Leandro González Pirez, quien expresó: “Pobre ‘Migue’, son rachas. La metía hasta con el pelo. Hoy es una adversa, pero tiene nuestro apoyo y sabe cuánto se esfuerza”.

Por otro lado, el Muñeco Gallardo se refirió al delicado presente del Colibrí: “Tiene un promedio de gol de su carrera, está atravesando un momento de no conexión con el gol. Pero una cosa es seguir en la búsqueda y otra es no. Tengo que hablar con el futbolista para ver si él también está con ese deseo y que la autoestima no baje”.

Tiempo después, el entrenador más ganador en la institución de Núñez aclaró que seguirá apoyándolo: “Tengo que acompañarlo y ver si es sacándolo o poniéndolo en el segundo tiempo. Yo tengo que cuidar la salud de mis futbolistas. Ya hay demasiado peso en el contexto externo como para que yo también lo machaque con la exigencia”.

La crítica a Miguel Borja

Ahora, Diego Latorre analizó el presente de Miguel Borja en ESPN: “Lo de Borja es preocupante, no da señales. Es indescifrable. Por ahí entra, te gana un partido, tiene una rachita y después desaparece y no colabora. A veces parece un estorbo en el equipo. No sabés cómo va a reaccionar en la jugada siguiente, si cuando la recibe la va a parar mal. Es un caso a revisar para el entrenador No es confiable”.

“El nueve no puede estar sólo para empujar la pelota en el área, que igual no es poco. No es un jugador de la preferencia del DT. Tiene diseñado otro equipo. Hay partidos en los que necesitás que salga y juegue. El entrenador quiere que se desmarque, que presione, que está activo, que sea más fiable, con más ductilidad. A veces se va, no está presente, se mueve poco, lo anticipan…”, confesó.