Inmediatamente después de concretar la salida de Enzo Díaz, la dirigencia de River se movió por los servicios de un nuevo lateral izquierdo. El apuntado era Lucas Esquivel, defensor de Atlético Paranaense que no descartaba su regreso a la Argentina. De esta manera, se gestó un tira y afloja entre el Millo y el conjunto brasileño, que contó con un giro rotundo en las últimas horas: “No quiere”.
Con el objetivo de brindarle una rápida alternativa a Marcelo Gallardo, Jorge Brito movió fichas por los servicios de Lucas Esquivel. Las primeras conversaciones fueron positivas, debido a que el defensor dio luz verde para cambiar de aires y afrontar un nuevo desafío. Restaba lo más complicado: llegar a un entendimiento desde los números con los altos cargos de Atlético Paranaense.
Desde Brasil no dieron el brazo a torcer, ya que descartaron de inmediato la primera propuesta del Más Grande: 2.5 millones de dólares más otro millón adicional en bonos por el 50% de la ficha. Por lo tanto, desde el cuadro de Núñez revisaron los términos, tomaron una decisión y elevaron una segunda propuesta, que se acercaba a las pretensiones del Furacão.
Pero, cuando Marcelo Gallardo se preparaba para recibir una nueva conversación, un volantazo de último minuto sorprendió a todos. “Paranaense CAMBIÓ SU POSTURA y NO QUIERE vender el 50% de Lucas Esquivel. El club 🇧🇷 comunicó que, de venderse, la operación tiene que ser por el 100% de la ficha”, informó Germán García Grova en la tarde del miércoles.
La decisión de River
Obviamente, desde Núñez no se quedarán de brazos cruzados: buscarán sacar adelante las negociaciones y adquirir un 80% de la ficha del ex Unión de Santa Fe. En definitiva, las próximas horas serán cruciales para conocer el desenlace de esta novela, que, a pesar de la presión que está haciendo el jugador, se extendió más de lo esperado por el Millonario.
