La clasificación de River a los octavos de final de la Copa Libertadores puede analizarse desde varios enfoques. Uno de ellos está relacionado con el armado del plantel y con cierto énfasis en Nicolás De La Cruz. “Un poco de presión”, expresaron sobre el uruguayo y su relación con el mercado de pases. ¿Se quiere ir? ¿Por qué lo de Flamengo quedó descartado?
Ruptura total con Flamengo
Las negociaciones entre River y Flamengo llegaron a su fin porque se produjo la clasificación a los octavos de final. Debido a que los dirigentes no quieren vender un jugador a un competidor directo. En consecuencia, el club brasileño tendrá que buscar en otro equipo un volante que satisfaga las necesidades de Jorge Sampaoli en el armado de un plantel competitivo.
¿Por qué hay presión?
Antes de marcharse al Mundial de Qatar, Nicolás De La Cruz renovó su contrato con River por una temporada más. Y el trato se realizó bajo una promesa de venta en el próximo mercado de pases. Debido a que entiende que cumplió un ciclo y porque pretende realizar una diferencia económica. Por ende, la intención es mudarse al exterior.
“Estaría ejerciendo un poco de presión para ser vendido por la promesa de venta que le hicieron al renovar. No al Flamengo, podría ser Europa, México o la MLS”, expresaron en ESPN. Por lo tanto, se tendrán que dejar pasar los días para conocer que ofertas pueda traer su agente en el vigente periodo de transferencias. Hay que recordar que el Millonario pide un ingreso superior a los 10 millones de dólares.
En lo que respecta a lo contractual, la ficha de De La Cruz se encuentra repartida en partes iguales entre River y Liverpool de Uruguay. En consecuencia, el acuerdo de venta debe ejecutarse con el consentimiento de los dos equipos. Si una parte considera insuficiente la oferta, la otra no tendrá mucho por hacer. Algo que impidió la transferencia al Flamengo.
