Estamos llegando a finales del 2025 que viene dejando muchas sorpresas tanto en lo deportivo, en las negociaciones del mercado de pases, o en las situaciones extra futbolÃsticas que afectan directamente a los jugadores. En este contexto, un ex River se vio involucrado en una situación muy delicada que afectó su presente en México, y que lo está haciendo vivir realmente una pesadilla.
El futbolista en cuestión es Lucas Ocampos, jugador del Monterrey, quien fue protagonista involuntario de una secuencia tan delicada como inesperada. El presente del atacante argentino en Monterrey está marcado por una serie de complicaciones fÃsicas que no dan tregua. Meses atrás el ex jugador del Más Grande sufrió un accidente domestico que marcó el final de su año.
¿Qué le sucedió al Ex River?
El hecho ocurrió cuando intentó asistir a una de sus hijas, que habÃa sufrido una caÃda durante una clase de equitación, en medio del apuro y la tensión del momento, Ocampos perdió el control de un monopatÃn, se cayó y golpeó violentamente contra el cemento, lo que le provocó una fractura de muñeca y traumatismo facial, lesiones que lo mantuvieron dos meses inactivo y lo alejaron de los momentos decisivos del campeonato mexicano.
Ahora, el panorama se complicó aún más, ya que se le sumó ahora un cuadro aún más sensible: una parálisis facial que encendió las alarmas en el cuerpo médico de Rayados. El club mexicano confirmó que Ocampos deberá cumplir con reposo absoluto, una medida que refleja la seriedad del diagnóstico y la necesidad de priorizar la recuperación por encima de cualquier urgencia deportiva.
Según el parte médico oficial, el zurdo padece una afección neurológica en uno de los lados del rostro, cuyo origen serÃa viral. Una situación compleja, que excede lo estrictamente futbolÃstico y pone el foco en la salud integral del jugador
Cuando parecÃa que lo peor habÃa quedado atrás y el camino de la recuperación avanzaba, apareció este nuevo cuadro neurológico, profundizando la preocupación. Desde Monterrey fueron claros, no habrá apuros ni riesgos innecesarios. El objetivo es que Ocampos se recupere plenamente para contar con el en el 2026.



