Relajado. Entretenido. A un año de su último encuentro oficial como entrenador de River, Marcelo Gallardo sigue sin recibir una propuesta de trabajo que le atraiga y sigue aprovechando de su tiempo libre. Y después de mostrarse en un torneo de pádel en Nueva York, el DT realizó un viaje muy especial y visitó a Matías, su hijo. En medio de esto, los hinchas comienzan a preguntarse, ¿por qué no aceptó las propuestas para volver a dirigir?
Hace algunas horas, Marcelo Gallardo viajó hasta Atlanta para visitar a su hijo Matías, actual jugador del equipo B de la franquicia. A pura sonrisa, se bajaron un rato del monopatín y posaron para la foto en la puerta del estadio del AU. Como ya había hecho con Nahuel, al que visitó en Colombia cuando jugaba en Once Caldas. Pero, esta vez al DT le tocó reencontrarse con el enganche.
En marzo de este año, Matías tuvo su debut (no oficial) en Primera de la mano de Martín Demichelis en un amistoso ante la Universidad de Chile. Sin embargo, no logró firmar su primer contrato profesional (fue de común acuerdo con la dirigencia). Por lo que, River arregló quedarse una plusvalía del 30% de una futura venta de Gallardo, que había perdido bastante terreno en la Reserva dirigida por Marcelo Escudero.
Lo cierto es que Gallardo sorprendió a su hijo y a miles de hinchas. Porque a donde va genera locura. Pero, en el mientras, también crece la expectativa sobre su futuro. Durante este lapso del año fueron muchísimos las propuestas que le acercaron al entrenador. Y para la sorpresa de todos, siempre terminó dando una respuesta negativa al respecto.
Aunque lleguen ofertas, sondeos y algunos intereses muy llamativos, Gallardo no va a volver a dirigir aún. ¿Por qué? Porque “no está desesperado” y quiere seguir disfrutando de estos tiempos. Cuando le llegue un equipo que le genera un sentido de pertenencia, que sea especial, seguramente aceptará. Por ahora, “necesitaba tener un año libre como este”, así lo informó Gustavo Yarroch hace días.