En el José Amalfitani el juego estuvo muy friccionado y a River le costó horrores hilar jugadas colectivas. Con este escenario, Vélez aprovechó una desatención defensiva del equipo de Martín Demichelis: después de un pelotazo largo, Aquino quedó en zona de remate y selló el 1 a 0. De esta manera, el Fortín se puso por delante y logró neutralizar al Millo durante la primera mitad.
En el arranque del complemento Vélez tuvo el segundo mediante un tiro libre de Aquino. Pero Franco Armani se estiró, y aunque dejó un rebote peligroso, evitó el festejo del Fortín. Minutos más tarde, llegó uno de los primeros remates del Millonario. Fue de Nicolás De La Cruz, quien probó de afuera del área pero la pelota se fue desviada.
Pese a esta oportunidad el local siguió siendo más claro. Y River tuvo que volver a recurrir a la salvadora aparición de Franco Armani, quien evitó que se cumpla la ley del ex. Es que se estiró de manera espectacular ante un remate esquinado de Braian Romero, sacando así la pelota al tiro de esquina. Pero el arquero no pudo hacer mucho ante el flojo rendimiento colectivo del equipo, y el segundo del Fortín terminó llegando.
Fue a los 15 minutos de la etapa final, después de una salida en falso de la última línea de River. El encargado de aprovechar este fallo garrafal fue Santiago Castro, quien esquinó su remate y dejó sin oportunidades al oriundo de Casilda. En definitiva, el equipo de Martín Demichelis siguió sufriendo por su falta de solidez y el conjunto local no perdonó.
Con el correr de los minutos, la cantidad de volantes que tiró a la cancha Martín Demichelis permitió que River se reencuentre con la pelota. En este tramo el más destacado fue Esequiel Barco, quien pese a su rebeldía, tampoco pudo encontrar el descuento. Finalmente, el resultado no volvió a moverse en el Amalfitani y el Millo debió regresar a Núñez con las manos vacías.