El mercado de pases genera una atracción casi igual a la que produce un partido. Porque una transferencia que estaba cerrada en la noche del lunes, no es descabellado que se caiga en la mañana del martes. Esto sucedió con la venta de Robert Rojas a Vasco Da Gama de Brasil. A razón de que River frenó las charlas tras registrar una serie de irregularidades.
El acuerdo que no fue
Los trascendidos señalaban que Vasco Da Gama había ofreció un millón de dólares en concepto de cargo para celebrar el préstamo de Robert Rojas. Además, se llegó a un acuerdo para con River y así colocar una opción de compra obligatoria de casi 3.5 millones. Los detalles fueron aclarados de manera verbal entre representantes de los clubes.
¿Qué pasó?
Al momento de recibir los papeles que llegaron desde Brasil, los directivos de River comenzaron a notar una serie de detalles que no coincidían en nada con lo hablado en la noche anterior. A razón de que los dirigentes de Vasco Da Gama cambiaron de gran manera los términos y condiciones de pago para celebrar la transferencia del defensor.
Por lo tanto, los nuevos arreglos que se efectuaron fueron descartados de manera inmediata. Ya que no condicen con las pretenciones que se tienen para celebrar la salida del zaguero. El cual formó parte de la concentración de cara al partido de esta noche ante Inter. Además de haberle informado que no viajará al exterior para someterse a la revisión médica.
¿Hay otros interesados?
Hace un tiempo se conoció que Botafogo de Brasil estaba tras los servicios de Robert Rojas. Sin embargo, Vasco se apresuró, le ganó y comenzó a negociar de manera formal. Tal vez lo que sucedió en el mediodía de este martes pueda reflotar el interés. Mientras que Independiente se mostró interesado en el jugador, pero no puede afrontar sus pretenciones salariales.