Después de conseguir un importante envión anímico ante Fluminense, River volvió a la acción en la Liga Profesional. Lo hizo lejos de su gente, ya que visitó el Estadio Florencio Sola para enfrentar a Banfield por la fecha 20. Aunque sufrió varios sobresaltos, el Millo se recuperó a tiempo, y con un Lucas Beltrán intratable, se quedó con los tres puntos.
En la tarde del lunes River protagonizó un arranque demoledor. En gran parte fue gracias a Lucas Beltrán y Pablo Solari, quienes se entendieron a la perfección y gestaron los primeros tantos del Millonario. Sin embargo, el panorama del cuadro de Núñez se complicó durante el cierre de la primera mitad, ya que sufrió por una insólita determinación.
Resulta que luego de un error de Robert Rojas, y posterior revisión en el VAR, Facundo Tello marcó la pena máxima para Banfield. Claramente, el central no tuvo intenciones de jugar la pelota con la mano, pero el árbitro no escuchó razones en el Florencio Sola y cobró penal para el local. Acto seguido, Giménez se encargó de volver a meter al Taladro en el partido.
Pese a ello, River no se desmoronó y volvió a encontrarse con su mejor fútbol una vez iniciada la segunda mitad. Fue después de una gran jugada colectiva entre Nicolás De La Cruz y Nacho Fernández, que culminó nuevamente en Lucas Beltrán. Igual que sucedió en el primer tiempo, el Vikingo no perdonó y tranquilizó a la gente del Millo.
Después de que el Millonario selle el 3 a 1, el partido se calmó. Una de las jugadas más destacadas tuvo como protagonista a Emanuel Insúa, que dejó la plancha ante Leandro González Pirez. Luego de ser llamado por el VAR, Tello chequeó la jugada y expulsó al hombre de Banfield. Tras esta decisión, River tuvo una más, en esta oportunidad quien empujó la pelota a la red fue Salomón Rondón, que rompió su mala racha y le puso punto final a la goleada ¡Triunfo clave!