Matías Almeyda es una de las personas que más importancia ha tenido en la historia de River, y no hay dudas al respecto. Allá por 2011, el Pelado asumió una responsabilidad gigante y se calzó el buzo de entrenador en el momento más complicado para el club. Y a más de 11 años de lo sucedido, el hombre de Azul recordó cómo tomó la decisión de ocupar el cargo: “No me importaba”.
Luego del descenso, el Millonario quedó inmerso en un presente plagado de incertidumbre. Tal es así que, tras la salida de JJ López, muchos focos se posaron en quién sería el nuevo técnico. Y para sorpresa de todos, el encargado fue ni más ni menos que el capitán de aquel equipo que perdió la categoría ante Belgrano.
Y justamente, Matías Almeyda recordó su asunción y todo lo ocurrido en una entrevista con ‘The Coaches Voice’. “La noche que descendimos hubo muchos problemas en el fútbol argentino. Era la primera vez en la historia, algo muy triste y muy feo. Esa misma noche me quedé pensando y a la mañana siguiente lo llamé a Passarella y le dije que yo quería ser el entrenador”, reveló inicialmente.
“Me dijo que estaba loco, porque si era el entrenador y me iba mal no iba a dirigir nunca más en mi vida. Le dije que no me importaba, que me iba a ir bien. Así que tomé ese riesgo”, continuó. “Era el técnico de mis excompañeros, así que era difícil. Hice siete años en uno, en desgaste, en pasión y en todo lo que viví”, agregó.
Y para cerrar, Almeyda habló sobre sus primeros pasos como DT: “Yo fui haciendo el curso de entrenador mientras era entrenador. Siempre fui bastante obsesivo en lo que me gusta, así que no paraba de trabajar en mi mente. Por ahí no tenía la práctica, pero iba a poner sobre la mesa todo lo que había visto y lo que me gustaba. Nunca hice lo que no me gustaba”.