De más está decir que el ciclo de Marcelo Gallardo es uno de los más exitosos de la historia de River. Con el Muñeco en el banco, el Millonario recuperó por completo su identidad y logró conquistas imborrables, sobre todo en el plano internacional. Justamente, en el día de hoy se cumplen seis años de la obtención de la Copa Libertadores 2015.
Los primeros años de la década del 2010 no fueron nada sencillos para River. Después de pésimos manejos dirigenciales, la banda perdió la categoría. Y a partir de allí inició un proceso de reconstrucción. Tras volver a primera, Ramón Díaz tomó la dirección técnica con el objetivo de darle mentalidad ganadora al equipo. Y luego llegaría Marcelo Gallardo para iniciar una era más que gloriosa.
En sus primeros seis meses en el banco, el Muñeco ganó la Copa Sudamericana 2014. Y al año siguiente, el objetivo era uno solo: la Copa Libertadores. River inició su participación en el certamen continental con muchos problemas. Y tras una fase de grupos tormentosa, clasificó a la siguiente ronda por la ventana. Ya en octavos de final, eliminó a Boca en aquel recordado partido del gas pimienta.
En cuartos dejó en el camino a Cruzeiro tras golearlo por 3-0 en Brasil. Y finalmente derrotó a Guaraní de Paraguay en semifinales para arribar a la gran final frente a Tigres. El 29 de mayo disputó la ida en México y se trajo un buen empate 0-0, por lo que todo se definiría en Argentina. Así fue como el 5 de agosto de 2015, con más de 60 mil almas presentes en el Monumental, River vivió su gran jornada.
El equipo de Gallardo venció al elenco mexicano por 3-0 con goles de Lucas Alario, Carlos Sánchez, de penal, y Ramiro Funes Mori, poniéndole fin a su racha de 19 años sin ganar la Libertadores. De esta manera, en aquella lluviosa noche, River se amigó con su historia y conquistó por tercera vez el continente. A su vez, en medio de los festejos, el Muñeco prometió ir por más, algo que cumplió con creces.
