La salida de Rafael Santos Borré preocupó a más de un hincha de River dado que es el goleador de la era Gallardo con 55 tantos en 149 partidos. En la previa al torneo y tras la gira por los Estados Unidos, Rodolfo D´onofrio se movió rápido y consiguió adquirir a Braian Romero, delantero proveniente de Defensa y Justicia, por una cifra que ronda los 3 millones de dólares.
La llegada del ex Independiente y Argentinos Juniors tenía dos miradas posibles: un jugador que se reinventó en una posición nueva gracias a Hernán Crespo y que consiguió marcar una gran cantidad de goles en Defensa y Justicia. Por el otro lado, la mirada que hizo dudar a más de uno y se debe a que el jugador explotó en una temporada como centrodelantero, pero que su nivel en un equipo como River no estaba asegurado.
Su debut llegó, nada más y nada menos, que en la ida por Copa Libertadores ante Argentinos Juniors donde se lo vio aceitado a la idea. Para colmo, brindó la asistencia para el 1-0 parcial que finalizará en empate a uno. Ante Colón, por la competencia local, ingresó a los 29 minutos del primer tiempo por Robert Rojas y pese a no convertir o asistir, logró llevar peligro al arco de Ignacio Chicco.
Llegaba para reemplazar a Santos Borré y casi como si fuera una casualidad, definiría la serie ante Argentinos Jrs, casi como el colombiano lo había hecho ante Racing en 2018. Primero marcaría un golazo desde media distancia aprovechando un error de Carlos Quintana y marcaría el segundo con el arco libre tras la asistencia de Matías Suárez. Para Marcelo Gallardo y el hincha, el monto abonado ya estaba saldado.
Tras eliminar al bicho de la Copa Libertadores, tocaría nuevamente la competencia local ante Unión. En un primer tiempo parejo, abriría la cuenta que ayudaría a, de a poco, que el millo se haga dueño del partido. Ante Lanús, tuvo poca participación y de todas maneras, casi brinda una asistencia si es que Matías Suárez llegaba a controlar el pase dado, pero la pelota se le fue larga.
Hoy, ante un Huracán que se replegó desde el primer minuto y con un Marcos Díaz importante manteniendo el arco en cero, ingresó a los 65 minutos por Federico Girotti. A casi 5 minutos del final, centro de Jorge Carrascal y de cabeza, le cambió el palo al arquero ex Boca y de esa manera marcó la igualdad. El delantero llegó a los 4 goles en 6 partidos consiguiendo así un promedio de 1 gol cada 95 minutos.