Bruno Zuculini es uno de los líderes que trabaja de manera silenciosa. Y en River siempre valoran su gran postura dentro de su plantel. Más allá de su perfil bajo y de haber corrido casi siempre desde atrás desde que llegó, se convirtió en pieza clave. Pero, nunca logró a ser titular y su continuidad nunca estuvo asegurada. Por lo que, las ofertas no tardarían en llegar. Sin embargo, ya tomó una decisión final con su futuro.
Con el correr de los años, Bruno Zuculini se convirtió en uno de los futbolistas más respetados y escuchados por sus compañeros. Sobre todo por parte de los jóvenes, que suelen recibir sus palabras y consejos. Es, de alguna forma, ese eslabón tan necesario para integrar a los más chicos con los más experimentados. Su rol es trascendental dentro del vestuario.
Zucu tiene un gran protagonismo dentro del grupo. Pero, el regreso de Matías Kranevitter -hoy recuperándose de una lesión- y la preponderancia de Enzo Pérez -capitán incuestionable del equipo- hacían suponer que, una vez más, podría buscar nuevos rumbos en este mercado de pases. Y la chance concreta se encuentra hace semanas para él.
Es que, en los últimos días, Zucu recibió el interés de la Universidad Católica de Chile. Los trasandinos estaban dispuestos a pagar la totalidad de la cláusula de rescisión para concretar su llegada. Hasta tuvo varios llamados de su entrenador, Ariel Holan, para tratar de convencerlo. La pelota ahora la tenía el jugador y debía tomar una determinación.
Bruno fue uno de los primeros futbolistas “mimados” por Martín Demichelis. Sin ir más lejos, en su presentación como nuevo DT de River, afirmó que “quería más jugadores como él, que quieran quedarse en el club”. Y el volante respondió otra vez con un gesto admirable: Zucu descartó la propuesta de la Universidad Católica y continuará en el club. Peleará por un lugar y aprovechará cada oportunidad para demostrar que quiere ir por más.