Argentina salió campeón del mundo. El equipo comandado por Lionel Scaloni venció por penales a Francia tras el 3-3 en el tiempo suplementario. El último tanto desde los doce pasos fue de Gonzalo Montiel, un hijo de la casa de River. Y quien se volvió protagonista por un conmovedor momento que vivió con Lucas Martínez Quarta, otro exjugador de Núñez.
Aunque todavía no cae la ficha es real. Sí, todo esto pasó. La Selección Argentina, en una de las finales más impresionantes de la historia del fútbol, empató 3-3 con Francia en los 120 minutos. Luego, se impuso en los penales gracias a la efectividad en las ejecuciones y a un Dibu Martínez que volvió a hacerse inmenso en un momento clave. Gonzalo Montiel marcó el último para la victoria.
Por lo que el nombre de Montiel será uno de los que se repita por muchísimo tiempo. El mundial fue de Messi, del Dibu, de Di María, de Enzo, pero también de él. Porque se hizo cargo del último penal y lo convirtió con una categoría magistral al igual que contra Países Bajos. Lloris se tiró sobre su izquierda y el ex River abrió el pie para cruzarlo hacia la derecha del arquero francés.
Nada que hacer, absolutamente nada. Celebración, locura, desahogo absoluto. Campeones del mundo, Argentina alzó el título más soñado. En medio de las celebraciones en el campo de juego del Estadio Lusail, apareció otro ex River que conmovió a más de uno: Lucas Martínez Quarta. Cabe recordar que Lucas que no logró quedar seleccionado en la lista final de Scaloni.
Sin embargo, viajó a Qatar para presenciar la final y obviamente se coló en los festejos. Cuando se cruzó con Montiel, hubo una sonrisa de oreja a oreja en ambos rostros. Allí mismo, los dos se fundieron en un fuerte abrazo. Bautista y Mía, los dos hijos de Martínez Quarta, fueron testigos privilegiados del momento totalmente inolvidable.
