Una tarde mágica vivió Miguel Borja este domingo en Mar del Plata. El delantero se manifestó con un grito y dos asistencias en la goleada de River ante Aldosivi como visitante. Ahora, el equipo de Marcelo Gallardo está de nuevo en carrera por el título de la Liga Profesional. Una vez finalizo en el encuentro, el colombiano lanzó una divertida confesión tras cederle el grito a Lucas Beltrán: “Un poquito”.
El recién llegado desde Junior ya había tenido 15 minutos el pasado jueves ante Gimnasia de La Plata en el Monumental. Pero ahora Gallardo lo mandó a la cancha a falta de 30 minutos para el final. Borja ingresó cuando el compromiso iba 0-0 y fue la llave para destrabarlo y darle la alegría a River en un duelo que comenzó bastante complejo.
Su primera aparición directa y demostrando toda su calidad fue en el minuto 31 minutos. Nicolás De la Cruz le envío un gran centro, bajó el balón de pecho y se lo dejó servida a Agustín Palavecino a pesar de un leve desvío en el central que lo marcaba. El ex Platense solo tuvo que disparar y enviarla al fondo para estampar el primer gol de la tarde.
Dos minutos más tarde con una jugada trascendental y enganche incluido, le dejó el segundo tanto a Lucas Beltrán. Y a los 36’ del complemento llegó su ansiado grito. Asistencia de Beltrán, encaró solo y la estampó en el arco rival. Una vez finalizado el choque en Mar del Plata, elegido como la figura, analizó la victoria. “Agradecido con Dios por la oportunidad que me dio”, comenzó en diálogo con ESPN.
Miguel Borja no se guardó nada
“Estoy contento, trato de ayudar al equipo cuando se necesita”. Pero con respecto al pase que le dio a Beltrán, Miguel Borja asumió cómo lo vivió: “El defensa me cerró bien y vi a Beltrán y se la di. Solo hay que pensar en el equipo”. Consultado por la magia que le gusta tirar en algunos momentos, confesó: “Un poquito, ja. A veces toca aparecer con eso, pero siempre con respeto al rival”.