El plantel de River se encuentra en Estados Unidos realizando la pretemporada bajo la estricta mirada de Marcelo Gallardo. Con el objetivo de llegar de la mejor forma a la segunda mitad de año, los dirigidos por el Muñeco realizan duros entrenamientos para la puesta en punto. Es que justamente, la segunda parte del 2021 tendrá como objetivo principal, para algunos jugadores, el de ganar, o recuperar, rodaje en el primer equipo, y uno de ellos es Jorge Carrascal.
El 10 del Millonario perdió terreno debido a los flojos rendimientos en sus últimos partidos, pero espera recuperar terreno. En comunicación con ‘River Monumental’, el colombiano habló sobre los últimos meses y lo que viene. “Este semestre que viene voy a dar lo mejor de mí. Me gusta hablar en la cancha, y demostrar en el campo”, manifestó en primera instancia el talentoso mediocampista.
“Tener la 10 de River no es fácil. Es un gran desafío para darse cuenta del lugar que estoy. Me dio mucha confianza para jugar con más ganas, y estoy muy feliz. Me encanta el desafío. Conozco la historia del Beto Alonso y el Burrito, entre tantos otros, que son unos fenómenos”, manifestó Jorge. Justamente, Gallardo le otorgó el histórico dorsal para darle un envión anímico, y así lo consiguió.
Sin embargo, Carrascal mencionó que también tuvo momentos difíciles en Núñez. “Cuatro veces me fui llorando a mi casa por la tristeza de lo que pasó en la cancha. Yo siento que estoy para más y lo reconozco, pero los jugadores no somos máquinas. Tenemos problemas y situaciones complicadas en las cuales no nos sale nada, son malas rachas como le pasan a todos. Ahora voy a poner la cabeza en rendir en esta pretemporada al máximo para darle al equipo lo que necesita”, declaró el enganche.
Por último, el colombiano se refirió a su situación en el Millonario. “Siempre me sentí bien en River. La gente me brinda mucho cariño. Me pone feliz estar en un grupo tan bueno, me genera mucha tranquilidad para sentirme bien adentro de la cancha. Ahora estoy más tranquilo y tengo otro chip. Todos mis compañeros vienen y me tranquilizan, ninguno tira mala energía, somos familia”, concluyó Carrasca.