Este domingo, River volvió a dejar puntos en el camino, y hace inquietar a todos los hinchas de cara a las últimas dos fechas. Justamente, ante Atlético Tucumán era un partido en el que el conjunto de Marcelo Gallardo debía sumar de a tres, aunque finalmente no lo hizo. Y como producto del enojo por el mal momento del equipo, una mala decisión de Andrés Herrera condujo a que el DT le propiciara un pequeño golpe en la espalda.
Al igual que ocurrió durante la última semana contra Talleres, el Millonario no se encontró consigo mismo y dejó una actuación muy pobre. Es por eso que fiel a su manera, el Muñeco estuvo muy enérgico al costado de la línea de cal. Y así lo dejó ver cuando a los 10 minutos de la primera etapa le dio un coscorrón al lateral.
Inmediatamente, los hinchas comenzaron a hacer eco de ello, ya que no es algo habitual en él. Y como era de esperar, en conferencia de prensa fue consultado al respecto y, ya más tranquilo, contó por qué lo hizo. “Es una cuestión de vivir los partidos así”, soltó el director técnico en primera instancia.
Pero, además, contó cómo lo vio él desde afuera: “Ya sabía que iba a picar y se iba a ir, estaba clarísimo. Resolver situaciones desde afuera es muy fácil, pero son ellos los que tienen que resolver desde adentro. Con la vorágine del partido, a veces uno se quiere anticipar y cuando el otro no se anticipa te da bronca”.
Para cerrar, le quitó importancia a lo sucedido de una manera más distendida. “Me reía porque me preguntaban qué me había pasado que le di un correctivo a Herrera. ¿Cómo le voy a dar un correctivo a Herrera? Si se lo hubiese dado, se lo tendría que haber dado bien. Fue una caricia en la espalda. Me la agarré con el pobre Herrera que es más bueno…”, concluyó Marcelo Gallardo.