Está claro que la rivalidad entre River y Boca es la más importante del fútbol argentino, y una de las más reconocidas a nivel mundial. Pero más allá de ello, hay algunos futbolistas que a pesar de todo lo que genera esa pugna, se han animado a vestir ambas camisetas. Y uno de ellos fue Sergio Berti, quien pasó directamente de uno a otro y, en las últimas horas, contó todos los detalles: “No era fácil”.
Si bien es cierto que hay varios casos de jugadores que defendieron ambos colores, ser transferido directamente de uno a otro es cuestión de unos pocos. La Bruja dio sus primeros pasos en el Xeneize, pero luego de una pelea, se unió al conjunto de Núñez, en donde finalmente se convirtió en un emblema importante.
Evidentemente, por lo significativo de la rivalidad, cuando ocurre algo así, ese futbolista es mirado de reojo. Y en una entrevista con ‘La Nación’, así lo reconoció Sergio. “No era fácil en ese momento cruzar de un lado a otro, me costó un poco entrar en la gente. El primer partido que jugué con la Reserva en el Monumental escuché el murmullo. Incluso la gente cantó que habían echado al Negro Enrique para traer a un bostero”, soltó en primera instancia.
La reunión entre Sergio Berti y Passarella
Pero a continuación, contó en detalle cómo se concretó su llegada a River: “Yo estaba con mis zapatillas de lona, camperita de jean y con el pelo largo. De golpe cayó Daniel Passarella con su nave, y en ese momento no sabía si tirarme debajo de la mesa o salir corriendo. Venía el primer capitán de la selección en levantar la Copa del mundo”.
Y continuó: “Dudé unos segundos. Se presentó y lo primero que me dijo fue si me animaba a jugar en River. ‘¿Cuándo empiezo?’, le contesté, y me respondió que ‘Mañana a las 9’”. Lo que nadie sabía en aquel momento era que aquel joven Sergio Berti se convertiría en un símbolo importante de aquellos años del Millonario.