Sabido es que la carrera del futbolista es muy complicada, y está compuesta por distintos momentos. Algunos buenos y otros no tanto. Si bien la parte más delicada suele llegar luego del retiro, hay casos de jugadores que la pasaron bastante mal ya en sus comienzos. Así le ocurrió al próximo refuerzo del River de Gallardo, que hace algún tiempo “quiso suicidarse“.
Más allá de que la gente los idealiza como personas que no tienen ningún tipo de problema y que disfrutan de una vida llena de lujos, los futbolistas también deben soportar situaciones complejas. Y en algunos casos, piensan en tomar una decisión tan drástica como el suicidio. En este contexto, los clubes terminan siendo fundamentales para estos jugadores, ya que son más que sus lugares de trabajo.
El que entiende bien esto es Emanuel Mammana, quien no tuvo un crecimiento sencillo, ni en lo futbolístico ni en lo mental. El defensor empezó a jugar cuando apenas era un niño, y ya había perdido trágicamente a su madre. Pero esto no fue todo, ya que cuando tenía 15 años y soñaba con debutar en primera, sufrió el fallecimiento de su padre.
Por supuesto que esta fue una situación muy difícil de sobrellevar para Ema, lo que lo llevó a aferrarse al club de sus amores. “Sentí ganas de largar todo después del fallecimiento de mi viejo. Pensé en dejar el fútbol, incluso pensé en suicidarme. Fueron dos o tres meses que me costaron muchísimo. Pero pese al dolor pude ir saliendo. Y River me ayudó“, sostuvo en diálogo con Diario Olé.
A su vez, reveló cuál fue la fuerza que lo empujó a seguir adelante a pesar de la angustia. “Me di cuenta que en casa habían luchado tanto para que yo llegara que no podía tirar todo por la tristeza. Tenía que cumplir el sueño de mi papá. Él quería que llegara a primera“, recordó. Y no solo lo consiguió, sino que ahora está a punto de tener su segunda etapa con la banda.