A más de un mes de la derrota de River ante Boca, la figura de Exequiel Zeballos continúa resonando en el mundo “Xeneize”. Aquella tarde en La Bombonera representó un punto de inflexión para el delantero, quien fue el arquitecto del triunfo no solo por su anotación, sino por el desequilibrio constante que mostró en un contexto de máxima presión. Su desempeño facilitó que el equipo rompiera una racha negativa ante su clásico rival, asegurando además el pasaje a la próxima Copa Libertadores.
Pese a la euforia colectiva, el “Changuito” reveló una perspectiva inesperada sobre su celebración tras abrir el marcador. En una entrevista para la revista oficial del club, el atacante admitió sentir pudor al observar las grabaciones del encuentro. “Ni siquiera me acuerdo bien cómo fue y hasta me da algo de vergüenza volver a verlo”, confesó, explicando que la adrenalina del momento anuló su consciencia sobre los movimientos realizados en el campo de juego.
Zeballos detalló que su reacción tras el gol a River fue puramente instintiva, impulsada por la ubicación de sus seres queridos en el estadio. “Yo suelo salir para ese lado porque ahí están mi viejo y un amigo. Sé que encaré para ahí, pero no sé cómo terminé casi en medio de la gente”, relató el futbolista santiagueño. Ese impulso lo llevó a fundirse en un abrazo con los hinchas, en una imagen que ya forma parte de la iconografía reciente del club.
Zeballos y su gol a River
Para el joven extremo, el partido cumplió con todas sus expectativas profesionales y personales. Al analizar el balance del choque, destacó la importancia de haber sido parte del once inicial por primera vez ante el eterno rival. “Fue el partido que uno siempre sueña: mi primera vez de titular contra River, un gol, una asistencia, la ovación y la clasificación a la Libertadores”, resumió, valorando la importancia táctica que tuvo su participación en el resultado final.
Dada su gran exposición y el nivel sostenido en el cierre del semestre, el nombre de Zeballos ha comenzado a sonar en diversas ligas extranjeras. Aunque el mercado de pases está activo y podrían llegar ofertas formales a las oficinas de Brandsen 805, el delantero mantiene los pies sobre la tierra. “No hay que apurarse, las cosas pasan cuando tienen que pasar”, sentenció, dejando en claro su compromiso actual con el crecimiento futbolístico dentro de la institución boquense.



