Después de sus últimos traspiés, River volverá a la acción con el objetivo de levantar cabeza y afianzarse en el semestre. No solo busca conseguir su lugar en la próxima etapa del Torneo Clausura, sino que también apunta a la Copa Argentina, que pasó a convertirse en su prioridad. Sin embargo, no es el único que tema que mantiene expectante a la dirigencia, tal como quedó a la vista con una última operación que se dio puertas adentro.
Luego de que River finalice su irregular participación en la Copa Libertadores, Jorge Brito se encargó de reanudar las novelas que habÃa dejado en stand by. AsÃ, se metió de lleno en las renovaciones contractuales de las figuras del club que, a raÃz de su talento y proyección, tenÃan chances concretas de recibir propuestas de los equipos del Viejo Continente.
Las conversaciones alcanzaron buen puerto por varias figuras, mientras que otras no se mostraron conformes ante la primera propuesta del Millonario y encendieron todas las alarmas. Ese era el caso de un mediocampista que se posicionaba como uno de los más destacados del equipo de Marcelo Escudero, pero que no terminaba de confirmar su continuidad: Cristian Jaime.
River cumplió su objetivo
Finalmente, todo quedó en un susto, debido a que los altos cargos del cuadro de Núñez lograron alcanzar un entendimiento con el futbolista y su entorno, dejando encaminada la novela. Esta realidad quedó en evidencia en las últimas horas, cuando el volante estampó su firma en el contrato y quedó vinculado a River hasta el 31 de diciembre de 2028.
A su vez, se incluyó una cláusula de rescisión que sirve para ponerles un freno a los equipos que puedan llegar a mostrarse interesados y obligarlos a negociar con el Millo ante una posible compra: 100 millones de euros. De esta manera, alcanzó su desenlace una de las novelas más estresantes, que permitió que Marcelo Gallardo asegure a un crack antes de semis de Copa Argentina.
