Acuña, en el ojo de la tormenta tras la eliminación de River: bronca, penal y expulsión

River fue por la épica a Brasil y finalmente terminó siendo derrotado por 3-1 ante Palmeiras para sentenciar su eliminación de la Copa Libertadores. Uno de los que quedó en el ojo de la tormenta fue Marcos Acuña, causante del penal que derivó en el segundo tanto del Verdao que fue el que terminó de rematar la llave a favor del conjunto Brasileño.

Marcos Acuña venía siendo en el semestre uno de los mejores jugadores de campo de River pero contra Palmeiras no estuvo a la altura. Ya en el partido de ida en el Monumental había cometido un error en salida que derivó en el segundo gol del Verdao. En Brasil sus emociones le jugaron una mala pasada y finalmente River lo terminó pagando caro.

Una noche para el olvido

Así como como se le destaca su temperamento para jugar también hay que decir que hay momentos donde Acuña pierde la compostura y esto sucedió en la noche de ayer en el Allianz Parque donde quedó envuelto en una gresca con los jugadores de Palmeiras luego de haber empujado a Vitor Roque por haberle tirado lejos la pelota. Acá el Huevo se ganó una amarilla.

En la jugada que derivó en el penal a favor de Palmeiras, Acuña no solo que no estaba en su lugar por estar reclamándole al árbitro una acción sino que luego llegó exigido y terminó cometiendo un penal evitable. Aquí vio la segunda tarjeta amarilla y se terminó marchando expulsado, dejando a River con 10 hombres en los instantes finales del partido.

Está claro que técnicamente Marcos Acuña es un jugador de enorme categoría con la chapa de ser campeón del mundo con la Selección Argentina. Sin embargo, hay cuestiones de temperamento que debe modificar ya que su pelea constante con los rivales derivó en su expulsión por doble amarilla en una serie definitoria de Copa Libertadores.