A lo largo del mercado de pases, Marcelo Gallardo no se anduvo con vueltas y permitió una gran cantidad de cambios en el plantel de River. Principalmente en cuestión de salidas, debido a que buscaba terminar los ciclos que no lograron convencerlo, más allá de la jerarquía de sus protagonistas. Así, quedó bajo todos los flashes una figura que arribó hace un tiempo directo desde Europa, pero que no logró reencontrarse con su mejor versión y debió despedirse: “A nadie le gusta”.
Mientras la atención de los fanáticos se centraba en los cruces por Copa Libertadores, la dirigencia de River seguía activa en el mercado de pases. No para permitir nuevas incorporaciones, sino para continuar el éxodo que comenzó Marcelo Gallardo hace un par de meses. De esta manera, Jorge Brito se mostró abierto a escuchar propuestas, tanto desde exterior como desde el fútbol argentino.
Una de las más interesantes obligaba a todos a poner el foco en Liniers, donde Guillermo Barros Schelotto seguía buscando alternativas para Vélez. Rápidamente, Fabián Berlanga pidió condiciones por Manuel Lanzini, quien, después de entender que no iba a volver a tener minutos en el Millo, optó por continuar su carrera en el Fortín.
Su adiós de River
“Los últimos meses fueron un poco duros, porque a nadie le gusta estar apartado. Pero bueno, es así, son cosas de la vida, del fútbol, decisiones que tienen que tomar“, comenzó el ex West Ham en su presentación con la camiseta de Vélez, detallando su despedida del Millonario y mostrándose listo para poner en marcha un nuevo desafío.
“Tuvimos una charla con Marcelo, me comunicó lo que él pensaba y el resto fue lo que pasó“, culminó el mediocampista, quien firmó contrato con el conjunto de Liniers hasta diciembre de 2026. De esta manera, terminó su etapa como futbolista del Millonario, donde no pudo reencontrarse con la versión que todos esperaban y terminó quedando relegado.

