River ya llegó a los Estados Unidos para disputar el Mundial de Clubes donde el debut está pautado para el próximo martes 17 de junio contra el Urawa Red Diamonds. Mientras tanto el mercado de pases se sigue moviendo donde uno de los jugadores a los que apuntó Marcelo Gallardo es Maxi Salas, uno de los hombres más importantes de Racing.
Gallardo entiende que Salas es un delantero ideal para su idea de juego y es por eso que decidió ir con todo para lograr su contratación. Lo llamó una y otra vez y el delantero le dijo que tenía ganas de pasar a River, aunque ahora se dan una serie de situaciones donde se genera un verdadero escándalo entre el jugador y Racing, mientras en Núñez esperan una definición.
Escándalo total
“En un principio, se conoció que la Academia solo lo vendería por la cláusula de rescisión, valuada en 8 millones de dólares. Sin embargo, aparece una cuestión importante que podría cambiar el rumbo de las negociaciones. En el equipo de Avellaneda alegan haber efectuado la compra de su pase a Palestino a principios de este año luego de la cesión de la temporada pasada, en la que se compró el 80% de su ficha y que incluso ya se abonó la primera de dos cuotas”, comentó Germán García Grova en Bolavip.
Luego agregó: “Por parte de Salas, su entorno afirma que el pase del futbolista no pertenece a Racing, sino que al propio jugador ya que nunca se ejecutó la compra de parte del club. En River sostienen esta misma cuestión, por lo que se anticipa un conflicto en puerta en lo que respecta al futuro del delantero académico”, afirmó el periodista.
¿Qué quiere decir esto? En Racing afirman que son dueños de la ficha del jugador, mientras que Salas asegura que La Academia nunca lo compró como estaba pautado y es por eso que ahora pide que le mejoren sustancialmente el contrato o se va a River. Gallardo sigue esperando una resolución favorable para quedarse con el delantero en una charla privada le dijo que sí a ponerse la camiseta de La Banda pero que ahora tiene que resolver cuestiones importantes en Avellaneda.
