Durante buena parte del mercado de pases, River intentó concretar la incorporación de un lateral izquierdo que compita con Marcos Acuña. Apuntó todos sus cañones a un único objetivo, debido a que Marcelo Gallardo se decidió y pidió por el arribo de Lucas Esquivel. A partir de ese momento, el Millo comenzó a protagonizar una agotadora novela con Atlético Paranaense, que recién se expresó sobre el cierre del periodo de transferencias: confirmado por su propio DT.
Después de las primeras propuestas informales que acercó Jorge Brito a las oficinas del Furacão, el arribo de Lucas Esquivel a Núñez parecía quedar encaminado. Los números que puso sobre la mesa el máximo dirigente de River se acercaban a las pretensiones del conjunto brasileño, además de que el lateral dejaba en evidencia sus ganas de jugar en el Millo.
Por ende, la oferta formal no tardó en llegar a las oficinas de Atlético Paranaense, con la ilusión de terminar con los idas y vueltas. En ese momento todo se torció para River, ya que los brasileños se mostraron reacios ante la idea de vender al futbolista y pusieron decenas de obstáculos. Finalmente, bajaron la persiana y confirmaron que el santafecino no estaba en vidriera.
Una postura que confirmó Maurício Barbieri, entrenador de Atlético Paranaense. “Esquivel se sometió a una intervención quirúrgica, mínimamente invasiva, pero quirúrgica. Todavía faltan algunas semanas. Necesito ver cómo está su desempeño”, expresó, dejando en claro que la ausencia del defensor solo tiene lugar por cuestiones físicas.
River no moverá fichas por otro lateral
No le cerró la puerta, debido a que evaluará de qué manera regresa a los terrenos de juego para confirmar su decisión. Pasando en limpio, todo indica que, si Esquivel vuelve a estar al cien desde lo físico, será tenido en cuenta nuevamente por el DT brasileño. De esta manera, termina de una vez por todas la gran novela del Millonario en el mercado de pases, por lo que Gallardo deberá conformarse con Milton Casco y Marcos Acuña para la banda izquierda de su equipo.
