Desde el club se trabaja en el mercado de pases aunque aun no haya comenzado. En este sentido, Marcelo Gallardo realiza algunos movimientos trascendentales de observación de cara a lo que viene. Aunque, hay un caso particular que viene siendo noticia. Como es el de quien se escapó de la concentración, fue acusado de “fiestero” y ahora se quiere ir porque “está aturdido de lo que exige el mundo River“.
La realidad es que River tuvo un semestre de agenda ajustadísima y con desafíos que no se lograron. Quedó eliminado de la Copa Libertadores ante el Atlético Mineiro. Y por el momento, los de Gallardo solo buscarán escalar posiciones en la Liga Profesional para la clasificación a los torneos internacionales de 2025. Y ya no puede dejar dudas al respecto.
Entonces, el mercado se vuelve clave. Hasta el momento, Gallardo tiene un total de cuatro caras nuevas con su llegada: Germán Pezzella, Fabricio Bustos, Maxi Meza y Marcos Acuña. Mientras de los que arribaron con Martín Demichelis en el cargo solo quedan Jeremías Ledesma, Federico Gattoni y Adam Bareiro. Dado que Felipe Peña y Franco Carboni se fueron luego.
Pero, el nuevo DT no solo tiene una ardua labor en lo que respecta a los refuerzos. En materia de salida, también hay un plan bastante llamativo. Especialmente con aquellos jugadores que vienen denotando un bajísimo nivel y donde hay alternativas. Como es el caso de Enzo Díaz, por quien por estos días hay rumores y críticas por doquier.
Hace semanas tracendió, según detalló Renzo Pantich, que el lateral se escapaba de las concentraciones para irse de “fiesta”. Esto no cayó nada bien y por supuesto comenzaron las opiniones de los fanáticos en las redes. Pero, también la información sobre lo que sería su futuro. Según reveló Lucho Castañares: “Díaz se quiere ir porque está aturdido de lo que exige el mundo River: ser una vidriera constante, ser el foco de atención 24/7”.
