A pesar de que su incorporación representó un importante gasto para la dirigencia, Adam Bareiro no se adaptó de inmediato al mundo River. Ya que había llegado por pedido exclusivo de Martín Demichelis, y parecía haberse quedado sin lugar en los primeros tramos del ciclo de Marcelo Gallardo. No obstante, consiguió darle un vuelco a su situación, obligando al DT a adoptar una nueva postura.
Durante el pasado mercado de pases, Adam Bareiro quedó en el medio de un tira y afloja entre River y San Lorenzo. Finalmente, la novela alcanzó su esperado desenlace y el paraguayo arribó a Núñez, con la intención de convertirse en una pieza crucial. Pero fue uno de los más afectados por el cambio de mando, dado que cayó varios puestos en la consideración.
Comenzó como titular en los primeros partidos de la nueva etapa del Muñeco, aunque solo por las ausencias de Facundo Colidio y Miguel Borja. Una vez que ambos regresaron de sus lesiones, el ex Ciclón quedó relegado al banco de suplentes. Su situación no sufrió cambios en las próximas presentaciones, por lo que estuvo más de un mes sin ver acción.
El nuevo panorama de Adam Bareiro
Sin embargo, logró recortar metros en la carrera por el puesto, regresando a la actividad contra Boca y Colo Colo. También rechazó el llamado de Gustavo Alfaro, con la intención de quedarse entrenando para volver a su mejor versión. “Adam Bareiro se quedó en River para reacondicionarse física y futbolísticamente. Está muy bien, el cuerpo técnico también lo ve muy bien”, informó Renzo Pantich.
En esta línea, dejó en claro que, en la consideración de Marcelo Gallardo, no existe tanta distancia como antes. “No lo descartaría como titular contra Vélez para ver si existe una competencia buena y positiva con Miguel Borja”, sentenció el periodista, palpitando la presencia del ex San Lorenzo desde el arranque para recibir al líder de la Liga Profesional.