La lesión de Manu Lanzini que hace saltar todas las alarmas en River: “No es fácil…”

Una de las jugada que provocó cierto dolor de cabeza en los hinchas fue cuando Manuel Lanzini pidió el cambio de manera automática a los 70 minutos. De hecho, los médicos de River tuvieron que ingresar para darle una mano y ayudarlo salir del campo de juego. “No es fácil”, manifestaron sobre la dolencia que el verdugo de Boca contrajo.

¿Lanzini no llega al martes?

A los 69, Kevin Zenón en un ataque de habilidad tomó la pelota y comenzó a gambetear a jugador de River como si fueran conos. Esto provocó que Manuel Lanzini decida intervenir para que no tenga facilidades de rematar contra el arco de Franco Armani. Y lo hizo con un corte que permitió lanzar el balón hacia el córner.

Sin embargo, la acción expuso que llegó con lo justo. De hecho, ese esfuerzo le provocó un dolor que lo tumbó en el césped. Y de manera inmediata tuvo que pedir el cambio porque no se encontraba en condiciones de seguir. La imagen que queda es que tardó en salir del campo de juego, además de necesitar ayuda para trasladarse.

El paso de las horas permitió que surja un detalle. “Fue un calambre que supongo que es de la inactividad“, manifestó Manuel Lanzini en TNT Sports sobre el dolor que sintió. Aunque en River van a tomar todos los recaudos para tratar de asegurar que se trató de lo que el jugador señaló y no que sea una lesión más severa.

Gallardo habló de Lanzini

“Hoy era un partido para que Manuel Lanzini genere ese clic mental en su cabeza y que gane una energía positiva que lo termine de soltar. Estoy muy contento con él, no es fácil jugar en River y cuando venís del extranjeros es muy difícil volver y adaptarse. Él necesitaba un momento así para volver a ser”, manifestó.

Las palabras de Marcelo Gallardo permiten entender que el volante se ganó la oportunidad de renovar su contrato y extenderlo hasta diciembre del 2025. Algo que le permitirá afrontar la pretemporada, además de contar con serias chances de pelear por un lugar dentro de la formación. Y no fue el único, debido a que Nicolás Fonseca aguantó 90 minutos con una amarilla jugando como volante central.