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“Un Paulo Díaz 2.0”: preocupación en River por lo que se dijo sobre el futuro de Miguel Borja

La cláusula de rescisión del delantero podría cambiar los planes de Marcelo Gallardo.

Miguel Borja
Foto: @RiverPlate

Sin lugar a dudas, Miguel Borja es una de las cartas más importantes que tiene a mano Marcelo Gallardo. Sus números lo respaldan, debido a que lo posicionan entre los delanteros más letales del mundo. Pero no todo es tranquilidad cuando se habla de él, ya que también existe una cuota de preocupación entre los hinchas. Así quedó a la vista hace minutos, cuando trascendió una información que enciende todas las alarmas: “Un Paulo Díaz 2.0”.

Todavía con Marcelo Gallardo al frente de River en su primer ciclo, la dirigencia salió en busca del sustituto de Julián Álvarez. Tras semanas de mucha especulación llegó a un acuerdo con Miguel Borja, quien estampó su firma en el contrato y empezó a escribir su historia con River. Evidentemente, su ciclo estuvo plagado de altibajos, aunque su talento se terminó imponiendo y permitió que se consolide como uno de los jugadores más importantes del plantel.

Es por eso que los seguidores riverplatenses no quieren ni pensar en su posible salida. Aunque existe un detalle que no los deja tranquilos, y que permite que otros equipos miren de reojo a Núñez: su cláusula de rescisión. Se trata de una cifra decreciente, que a partir del 1 de enero de 2025 pasará a ser de apenas 4 millones de dólares.

Ante este escenario, Renzo Pantich soltó una información que promete convertirse en un futuro dolor de cabeza. “River puede tener ‘un Paulo Díaz 2.0’ en diciembre. Miguel Borja va a recibir ofrecimientos de Medio Oriente y le van a tener que duplicar el salario para que se quede. Su salario es top 6 del plantel”, sentenció el periodista a través del programa Cuidemos el Fútbol.

El paralelismo con Paulo Díaz tiene como motivo la importante suma de dinero que debió desembolsar el club en este mercado para retenerlo: se convirtió en el jugador mejor pago del fútbol argentino. Por lo tanto, asoma un nuevo problema para la dirigencia, que podría tomar forma de manera definitiva con la aparición de un equipo de Medio Oriente que esté dispuesto a desembolsar 4 millones de dólares.