Durante la pretemporada, el mundo River recibió una pésima noticia: Agustín Sant’Anna sufrió un golpe y se convirtió en una baja muy sensible. Tal fue así que se vio obligado a pasar por el quirófano, para luego afrontar una extensa recuperación. A días del cruce con Talleres por Libertadores se conoció su nuevo panorama, y la noticia repercute directamente en la decisión de Marcelo Gallardo.
Todavía con Martín Demichelis en el banco de suplentes de River, Agustín Sant’Anna dijo presente en el primer amistoso de pretemporada. La pasó bastante mal, debido a que, en el primer tiempo del encuentro contra Millonarios, chocó con un rival y no pudo seguir en el terreno de juego. Los estudios posteriores arrojaron una rotura del menisco externo de su rodilla derecha, por lo que debió ser intervenido quirúrgicamente.
Para tranquilidad de todos, la operación salió según lo planeado y el defensor pudo regresar a su casa para descansar. Días más tarde empezó a transitar su recuperación, con trabajos de kinesiología y gimnasio. Fue dejando atrás esta dura lesión y se ilusionaba con meterse en el once de River, que ahora comandaba Marcelo Gallardo.
Pero, a pesar de que no falta mucho para que vuelva al ruedo, no podrá meterse en el cruce de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores. “Sant’Anna está muy cerca de recibir el alta médica, pero no llega al miércoles con Talleres de Córdoba”, informó Maximiliano Grillo. Por lo tanto, Gallardo ya piensa en el encargado de ocupar la banda derecha de su equipo contra la T.
Hace unos días, todo parecía indicar que el elegido iba a ser Milton Casco. Sin embargo, el flojo presente del ex Newell’s y los movimientos de la dirigencia en el mercado dejaron conformado otro panorama: aunque tuvo su primera práctica hace unas horas, Fabricio Bustos se perfila como el 4 titular de River para medir fuerzas con Talleres en el Mario Alberto Kempes.