Las cosas empezaron muy bien para la Selección Argentina contra Irak, ya que se puso en ventaja antes del primer cuarto de hora. Pero el asunto se fue complicando con el correr de los minutos, tanto desde el resultado como en lo físico. Así quedó a la vista con Lucas Beltrán, quien no pudo continuar y debió ser reemplazado antes del cierre de la etapa inicial.
A diferencia de lo que sucedió en el debut, Lucas Beltrán se paró unos metros por detrás de Julián Álvarez en el once albiceleste. De esta manera cumplió un papel centrado en la creación del juego, con mayor participación y lejos del área rival. No le fue nada mal, debido a que rebotó de gran manera y consiguió asociarse con sus compañeros.
Gracias a su presión constante y esfuerzo, fue importante para que la Albiceleste se ponga en ventaja. Sin embargo, su buena actuación se vio frustrada por la mala fortuna. Es que, sobre el ecuador del primer tiempo, el ex River protagonizó un choque y quedó bastante sentido. Intentó mantenerse en el terreno de juego en los minutos siguientes, sin embargo, su cuerpo no se lo permitió.
“Se me quedó dura la espalda”, le dijo a Javier Mascherano, quien apuró los trabajos de Giuliano Simeone. Finalmente, el hijo del Cholo saltó al terreno de juego, por lo que terminó el partido para Beltrán. Una pésima noticia para la Selección Argentina Sub 23, que minutos más tarde, sufrió por una desatención en su última línea y se despidió de su ventaja en el resultado.
En definitiva, los primeros 45 minutos llegaron a su fin con un complicado panorama para los de Javier Mascherano: Irak lo empató sobre el cierre y hace peligrar la continuidad albiceleste en los Juegos Olímpicos. Es por eso que, en el complemento, la Selección Argentina buscará por todos los medios volver a ponerse por delante para intentar encauzar su rumbo.