Luego de consagrarse bicampeones de América, Enzo Fernández estuvo en el ojo de la tormenta después de publicar un vivo de una canción contra Francia. La misma consistía en una burla hacia los jugadores franceses que han nacido en países africanos, lo que fue catalogado como racista. Tras esto, Alexis Mac Allister salió al cruce.
Este jueves, Alexis brindó una entrevista con Urbana Play FM y se refirió a la polémica con Enzo. “Es un tema muy sensible, hay que tener cuidado con lo que se dice y hace. Europa es mucho más sensible porque Argentina no es un país racista y no estamos acostumbrados a hablar tanto de eso. Sí es un tópico importante”, expresó el oriundo de La Pampa.
“Hay que valorar que él ya pidió las disculpas y explicó lo que pasó. No hay mucho más para decir. Lo conocemos, sabemos que nunca lo haría con mala intención, sino que es un cántico más en tono de burla que otra cosa, pero hay que tener mucho cuidado”, confesó el actual mediocampista del Liverpool, quien comparte el centro de la cancha con Fernández en la Selección Argentina.
Las declaraciones de Alexis Mac Allister
Por otro lado, Alexis Mac Allister hizo hincapié en lo que fue la final de la Copa América y los incidentes en la previa. “Sentí muchos nervios sobre todo en la previa, y por todo lo que pasó en el estadio, no tanto por el partido. Me afectó todo lo que pasó. Fue difícil. Nosotros somos jugadores de fútbol, pero no somos de madera. También nos pegan estas cosas”, comentó.
“Lo del otro día, con mi familia, fue un momento de mucho nerviosismo porque escuchaba que las puertas estaban cerradas. Estaba hablando con mi novia en ese momento hasta que dejó de responderme porque se quedó sin señal. Cuando cierran las puertas, vienen al vestuario y nos empiezan a decir que algunas familias ya habían entrado y yo estaba como ‘¿y mi familia, qué onda?’”, sostuvo.
En ese sentido, recalcó: “Nadie me respondía porque no había señal, era todo un quilombo, hasta que me recontra calenté porque veía que nadie me ayudaba y yo no me podía comunicar con mi familia y decidí salir a la puerta. Ahí estuve 15 o 20 minutos intentando llamar a mi familia hasta que me pude comunicar. Y les tuve que decir hasta qué lugar del estadio tenían que ir y que los iba a estar esperando ahí”.
“Después, cuando ellos llegaron… Hacían 35 grados, habían estado dos horas y media abajo del sol. Llegaron y eran agua. Todos transpirados. Mi novia llorando. Otras familias llorando. Ahí te ponés a pensar y decís: ‘Qué locura estamos viendo’. ¿Cómo nosotros nos vamos a enfocar para un partido así? Incluso, el cuerpo técnico se me acercó porque me vio un poco tocado por la situación”, confesó.