Al frente de River, Martín Demichelis conquistó tres títulos. Sin embargo, su ciclo está muy lejos del imaginado por los hinchas, debido a que su River queda a deber en los mano a mano. Así quedó a la vista en la noche del martes, cuando después de una dolorosa eliminación de la Copa Argentina a manos de Temperley, el DT sumó un nuevo asterisco a esta pésima estadística.
En primer lugar, hay que mencionar los cruce de eliminación que terminaron de buena manera para River. Comenzó con el pie derecho, debido a que superó a Banfield (desempate de Trofeo de Campeones 2020) y Racing de Córdoba (Copa Argentina 2023). Sin embargo, a mediados del año pasado todo se torció, ya que el Millo dio su primer paso en falso en este tipo de partidos ante Talleres.
De esta manera se despidió de la Copa Argentina, y parecía centrar toda su atención en la Copa Libertadores. Pero ahí también quedó a deber: quedó fuera en octavos de final ante Inter de Porto Alegre. Unos meses más tarde logró encauzar un poco el rumbo, cuando superó a Belgrano de Córdoba por los cuartos de final de la Copa de la Liga.
No obstante, en la instancia siguiente se reencontró con sus dudas. Cabe recordar que empató con Rosario Central en semifinales, para luego quedar afuera desde los doce pasos. A partir de ahí las cosas prometían encaminarse: consiguió dos títulos a partido único (contra Rosario Central y Estudiantes) y avanzó en una nueva edición de la Copa Argentina (ante Excursionistas).
Aunque una vez más, llegaron dos derrotas que cambiaron el panorama: el Millonario se despidió de la Copa de la Liga 2024 ante Boca, mientras que quedó fuera de otro de sus grandes objetivos ante Temperley. En definitiva, el equipo de Demichelis apenas superó 6 de los 11 mano a mano que disputó, demostrando que este tipo de encuentros le cuestan el doble.